Se quitó la tirita que tenía en el dedo, era roja, pequeña, el corte con los alicates
apenas se notaba. Miró el bolso, lo cogió entre las manos, lo llevo a la nariz
y mirando la fotografía impresa en él, cerró los ojos y notó el
aroma a salitre y a hierva.
El bolso era algo más que un regalo de cumpleaños, era la manera de decirle a su hermana, te quiero, gracias por estar ahí, lo había hecho con sus manos colocando un estampado de una foto de cuando eran adolescentes, un paisaje de aquellos veranos juntas en los que empezaban a descubrir la vida.
El cumpleaños fue una gran fiesta, muchas chicas como ellas, jóvenes, de profesiones liberales y todas en mayor o menor medida apasionadas de la moda.
La mayoría de los regalos eran complementos de ropa, el segundo bolso que recibió fue el de su hermana, al verlo le gustó pero no le prestó mucha atención, tenía más regalos que abrir, fue al ver la cara de su hermana mientras le daba las gracias, cuando se fijo en el estampado.
Es...
Sí, es allí, y es esa foto..
Abrazo el bolso que ya la acompaño toda la noche, muchas de sus amigas pidieron uno como aquel, y cuando se enteraban que era una creación artesanal insistían más.
Comentándolo al día siguiente, se animaron mutuamente a explorar ese camino más por hacer algo juntas que por el dinero que pudieran sacar.
Y así en 2012 nace bolsos Zubi, llevan ya 3 colecciones, y no solo venden en España y a través de la plataforma Online sino que cuentan con puntos de venta en Italia y Japón y como en los cuentos el amor y la ilusión de dos hermanas consiguen vencer al fantasma de la crisis.
El bolso era algo más que un regalo de cumpleaños, era la manera de decirle a su hermana, te quiero, gracias por estar ahí, lo había hecho con sus manos colocando un estampado de una foto de cuando eran adolescentes, un paisaje de aquellos veranos juntas en los que empezaban a descubrir la vida.
El cumpleaños fue una gran fiesta, muchas chicas como ellas, jóvenes, de profesiones liberales y todas en mayor o menor medida apasionadas de la moda.
La mayoría de los regalos eran complementos de ropa, el segundo bolso que recibió fue el de su hermana, al verlo le gustó pero no le prestó mucha atención, tenía más regalos que abrir, fue al ver la cara de su hermana mientras le daba las gracias, cuando se fijo en el estampado.
Es...
Sí, es allí, y es esa foto..
Abrazo el bolso que ya la acompaño toda la noche, muchas de sus amigas pidieron uno como aquel, y cuando se enteraban que era una creación artesanal insistían más.
Comentándolo al día siguiente, se animaron mutuamente a explorar ese camino más por hacer algo juntas que por el dinero que pudieran sacar.
Y así en 2012 nace bolsos Zubi, llevan ya 3 colecciones, y no solo venden en España y a través de la plataforma Online sino que cuentan con puntos de venta en Italia y Japón y como en los cuentos el amor y la ilusión de dos hermanas consiguen vencer al fantasma de la crisis.
Os dejo unas fotos de las hermanas Zubizarreta y algunas de sus
creaciones