Tiendas Pop-up

Las tiendas  pop-up nacen como un concepto de marketing hace menos de 10 años tiene la característica de que  tienen una vida muy limitada en el tiempo, que pueden ser de unas horas hasta un fin de semana largo.

En origen las pop-up nacen para reforzar la imagen de marca, enseñar nuevas colecciones, por eso era  muy importante la localización de las tiendas el diseño de las mismas y la publicidad que se le de. Estas acciones tenían la gran ventaja de crear una experiencia de compra distinta, y reforzar la imagen de la marca. En su inicio la pop-up de Adidas con su tradicional caja de zapatillas y el pop-up de Prada en París destacaron sobre el resto y marcaron un camino a seguir.

Con la crisis y la inversión menor en marketing,  las pop-up están derivando en locales temporales en los que las marcas no invierten en diseño y las aprovechan para vender  sus stock de temporada, convirtiendo una acción de refuerzo de marca en una acción de venta que finalmente la perjudica. Se está tendiendo más a los contenedores de Uniqlo o simplemente en alquilar locales vacíos por una semana y vender el fin de semana, sin invertir en el diseño de los mismos.