En el año 2000 se abre la
primera tienda de Factory Chocolat hoy son 24 las que hay en España contando
con una tienda en Androrra y otra en Eslovaquia.
La historia de la fundación de
la empresa es un ejemplo de reinventarse a uno mismo, del no tener miedo a
buscar nuevos caminos personales y profesionales y es que, en ocasiones, tras
las crisis los caminos que se abren pueden ser maravillosos.
Michael Laline era un arquitecto
belga que se dedicaba al diseño de interiores con un futuro profesional cuando
menos prometedor y habiendo ganado ya algunos premio de diseño, deja el trabajo
y en un proceso de evolución personal llega al chocolate sin tradición familiar
ni experiencia previa, y junto con su
pareja, Titus Ruiz, consiguen crear una empresa
única y prácticamente sin competencia a la que se le acumulan los premios y
galardones entre ellos el Primer Premio “ Príncipe de Asturias” Excelencia
Empresarial 2005 (Categoría Diseño y Comunicación)
La empresa se basa
fundamentalmente en 2 principios:
- Producto de gran calidad.
- Gran diseño en producto y packaging, siendo el obrador de Sant Cugat del Vallés, el corazón del diseño y de la empresa
El camino de Chocolat no ha sido
un camino de rosas, teniendo que tomar decisiones en ocasiones difíciles, como
la renuncia a la venta a través de distribuidores multimarca ya que el cuidado
del producto no era siempre el más adecuado, el cierre de tiendas o el freno de
la expansión internacional.
El origen del cacao que
utilizan es de Java, Santo Tomé, Aruba, , Trinidad, Gana, Madagascar... y mi
preferido el de Granada, que hace que sus bombones sean pequeñas
píldoras de felicidad.